Madre

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — bar_lange at 6:07 pm on viernes, septiembre 20, 2013

Mi madre me acariciaba desde alli.
Un hilo de luz
y unas manos en mi abdomen
me decian que era el fin.
El grito mas desesperado de mi vida
me desperto para siempre.
Madre,
no regresare esta noche,
bebere hasta olvidar los rencores.
Una mujer prohibida
caminaba ante mis ojos.
Buen dia madre
¿te tratan bien aqui?
Vendre la semana que viene,
¿te acuerdas de mi?
Adios madre.
El grito mas desesperado de mi vida
me desperto para siempre.

Libertad

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — acuarela at 3:01 pm on jueves, septiembre 19, 2013

Soy libre, como las aves,

como el viento,

libre, como las olas del mar…

libre, como el aroma de las flores…

soy libre… y con esta libertad te digo

no puedes cortar las alas a la mariposa

y esperar que pueda volar,

puedes enjaular al ruiseñor,

pero no su trinar… ni su alegre canción.

Podrias intentar cortar mis alas,

romper mis ilusiones y mis sueños

en mil pedazos y sin embargo

mi espiritu todavia sera libre.

muñeca de vudú

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — lizzie at 3:59 am on jueves, diciembre 9, 2010

Tengo mi propia muñeca de vudú en mis manos
la pincho con los alfileres de tus recuerdos;
esa mirada intensa, como una llamarada de fuego,
y tu sonrisa, ¡oh! ¡Que sonrisa!
narcótica, alucinógena
en la que viven mis sueños.
Me torturo yo misma
con el recuerdo de nuestras conversaciones:
lo que dijiste, lo que quisiera que hubieses dicho
lo que debí decir y lo que no.
Me admito masoquista
las cicatrices del pasado lo revelan
porque tus palabras son solo mentiras
que me hacen sentir especial
pero al fin y al cabo, mentiras,
tambien yo misma me las digo y me las creo
y ya no se diferenciar entre lo que es real y lo ficticio
lo que realmente pasó entre nosotros
y lo que fue solo un sueño.
Pero, ¡total! la felicidad no existe en esta vida
solo destellos de ella
pequeños momentos que vale la pena atesorar.
Yo sólo sé que tu estás en todos ellos
por eso me quedo con mi muñeca de vudú
y con ese dolor que me hace sentir viva;
prefiero adolorida contigo
que sin ti, muerta.

Alzheimer

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — Mariano Campo at 1:29 am on miércoles, octubre 6, 2010

Luz de vida que se apaga.

Recuerdo de lo que algún día fue.

Recuerdos, agua clara entre las manos,

huyendo entre las grietas de vejez.

Perlas negras que contemplan,

el rostro que en Abril enamoró.

Bello rostro que sonríe,

rostro que su mente ya olvidó.

Árbol centenario y orgulloso,

destruido por parásito interior,

árbol viejo que se seca,

sin sentir que alguna vez existió.

¿Recuerdas los recuerdos?

¿Fuiste niño o mayor?

¿Soñaste que volabas?

¿Has llorado por amor?

Vida que titila y se consume.

¿Comprendes la pesada oscuridad?

Suaves pétalos te acarician,

cuando vuelves a la luz.

Mariano Campo.

ERES

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — MARAZUL at 12:48 am on domingo, octubre 3, 2010

Navega mi corazón por el mar de tus sentimientos,
como remos mi pasión, como bandera tu cuerpo…..

Unos ojos que me miran y me dejan sin aliento,
un aroma que me embriaga,
un sabor que llevo dentro….

Son tus manos que recorren piel con piel, cuerpo a cuerpo,
derramando las caricias que nos funden en deseos.

Es tu voz la que me llama , me acerca hasta tu morada,
amor….silencio del alma, amor….sentir tu mirada….

Es la magia del deseo,
la pasión del corazón,
la que enciende el sentimiento
que vive en mí por tu amor..

PERLAS DE SENTIMIENTOS

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — cc at 11:28 am on jueves, septiembre 2, 2010

Perlas de sentimientos son los recuerdos
gotas de rocío? en el corazón.
Espinas y pétalos son los recuerdos
¡Caminos del ayer,? ? tan lejanos como
la tierra y el sol!
¡caminos de alegrías y dolor!
Recuerdos que lloran
Recuerdos que ríen
Recuerdos que gritan
Recuerdos que? duermen en el corazón.

Esta noche

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — Alicia at 4:03 pm on miércoles, febrero 3, 2010

?

Esta? noche

?

Fuimos pájaros libres en el aire

cuando mediaba nuestra primavera,

fuimos gotas de lluvia energizando

las flores que ? esperaban a mi vuelta.

?

Fuiste un remanso azul frente a mis grises,

una brisa serena en mis tormentas.

Y fui pegada a ti, junto a tu sombra,

recorriendo tus montes y tus sendas.

?

Fuimos una simbiosis renaciendo

en cada amanecer con ansias nuevas.

Fue el verde de tu valle mi reposo

y el calor de mis brazos nuestra hoguera.

?

Las horas se encargaron de mostrarnos

su paso en mi? temblor y en tu mirada,

en los pliegues que el ? tiempo inexorable

dibujó en nuestra piel y en nuestras almas.

?

Enfrentamos entonces el otoño

pletóricos de amor y de esperanzas,?

soñando en alcanzar el horizonte, ? ? ? ? ? ? ? ? ? ? ? ? ? ? ? ? ? ? ? ? ? ? ?

desafiando al destino y al mañana.

?

Por eso es que esta noche, amado mío,

con tus manos cubriendo mi regazo,

transformaré las lágrimas en lluvia

y retendré tus besos como pájaros.

?

Seré un remanso azul frente a tus grises

y una brisa serena en tu tormenta.

Me iré pegada a ti, junto a tu sombra,

abrazando tus montes y tus sendas.

?

Y mientras el reloj agonizante

descuenta los segundos, ya no temas,

yo he de cerrar tus ojos y en silencio

te besaré en la ? boca hasta que duermas.

Solían ser así…

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — Ursus at 6:18 am on jueves, diciembre 3, 2009

Han llegado estos recuerdos antiguos

blancos y con destellos

blancos pero no menguos.

Estos recuerdos de papel decrepitado,

recuerdos exhaustos y olvidados…

recuerdos cansados y apretados.

Recuerdos de tí, hombre naciente

hombre de lindos colores y frentes abiertas,

frentes en blanco de flores jazmines…

hombre de todos y de ninguna gente.

LA VIDA PASA EN UN SEGUNDO

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — Beny at 11:20 pm on miércoles, noviembre 25, 2009

Vidas insufribles dentro de la mente

Situaciones increíbles como la misma muerte

Todos los recuerdos que fluyen como una fuente

Me golpean la frente como un torrente

?

La niñez alegre y desenfadada

Mi madre pendiente y siempre entregada

Un padre recio pero justo, con? la vida cansada

Hermanos solidarios con los que siempre contaba

?

Veo un pasado desconocido

En cada etapa de mi vida siempre he crecido

El que ayer se acostó no es el mismo que hoy despertó

Soy el mismo que nunca existió

?

Busco el sentir del pétalo de la rosa en mi mejilla

Busco la caricia tierna de mi madre después de mis pesadillas

Busco la fortaleza de mi padre en mi cobardía

Busco a mis hermanos y su grata compañía

?

Mi pasado es mi presente y pasa tan veloz como el viento

Siento que aun cuando me equivoque no me arrepiento

Nunca la vida tiene argumento

El pasado, el presente, el recuerdo no tienen tiempo

Perfil

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — SILVIA SOLIS CAMACHO at 6:31 am on miércoles, noviembre 25, 2009

Te alimentas de sombras,

vives la noche

tu piel temblorosa

se impregna de rocío

se altera trémula de gozo.

?

Beso tus orillas,

como el mar? a la arena

como el sol? al horizonte.

?

Tus manos se deslizan;

las siluetas…

? ? ? ? se engarzan

? ? ? ? se acercan

? ? ? ? se penetran

? ? ? ? se dispersan

?

dos en uno…

uno en dos…

extremos infinitos…

? ? ? ? ? ? ? sentencia del destino.

Recuerdos

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — Rosa Marina Campos at 10:35 pm on martes, noviembre 24, 2009

?

De aquel ? amor que pudo ser hermoso,

Queda un recuerdo apenas revelado

Solo las lágrimas son agua y van al mar

Pero el destino quiso que te marcharas, y se perdió la magia.

? No es la distancia la causa del olvido, púes aquel amor, sé detuvo al

Andar.

? Quiero verte por última vez la niña de tus ojos, tus dientes de perla, tus labios de carmín

El horizonte se acorta los arboles esparcen suspiros alados, la luna con sus hilos de plata me elevan consigo donde tu lecho yo vería a mi amado.

Todo es nuevo

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — Quioreng at 3:27 pm on martes, noviembre 24, 2009

Caras, personas, nombres
Se agolpan en mi memoria
Todos los recuerdos
Que me han creado
Memorias amables, y otras amargas
todas tan importantes,
cada una ha dejado

un tatuaje en forma de manía
de poder o de miedo
no elijo ni cambio ninguna.

Todos los recuerdos,
Olores trasladores directos
A otros tiempos
Canciones que me mecen y
Me traen tus besos
Risa, timidez, cosquilleos
Descubrimientos, todo es nuevo
Idealismo, ingenuidad e inmadurez
Dichosa,? es lo que más anhelo.

Bate Morfeo tus alas

Dejamé soñar despierto

Y que un millón de hadas

Alumbren mis deseos.

Todo es nuevo

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — Quioreng at 10:22 am on martes, noviembre 24, 2009

?

?

Caras, personas, nombres

Se agolpan en mi memoria

Todos los recuerdos

Que me han creado

Memorias amables, y otras amargas

todas tan importantes,

cada una ha dejado su marca

un tatuaje en forma de manía

de poder o de miedo

no elijo ni cambio ninguna.

Olores trasladores directos

A otros tiempos

Canciones que me mecen y

Me traen tus besos

Risa, timidez, cosquilleos

Descubrimientos, todo es nuevo

Idealismo, ingenuidad e inmadurez

Dichosa,? es lo que más anhelo.

El rigor de las piedras

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — MiguelR at 9:37 pm on domingo, noviembre 22, 2009

Quien serás en mis sueños,
quien serás eterna risa en el alma,
entre disputas de tiernos ogros,
quien serás entre espejos que dañan.

Aquí y allí estar,
no veo el fin al que llegar,
no veo la paciencia de la espera
ni el rigor de las piedras,
siento tu devenir,
húmedo y soleado,
en plena tinieblas musicales,
en bares de ginebra y menta,
en pequeñas velas
de vidrios en tus ojos,
no se ensuciaran tus talones,
no te reirás ya por mi,
no te sentaras en mi corazón,
no lloverá en tus piernas.

ME ACABAS DE DECIR…

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — NADDIA at 8:10 pm on domingo, noviembre 22, 2009

Me acabas de decir que vas a verla

En un e-mail ingrato que me llega

Y siento que me amputan las dos manos

El alma, la cabeza y la sesera.

?

Me acabas de decir que la visitas

Cuando nunca has querido conocerme

Y el corazón se arranca de mi cuerpo

En un latido inerte.

?

Me acabas de decir que no me quieres

O no lo has dicho, pero lo he soñado

Y cuento puñaladas lacerantes

Horadando el costado.

?

Me acabas de decir que del recuerdo

Ella ha vuelto otra vez a reclamarte

Que el aire es fuego con la brasa ardiendo

Y todo es como antes.

?

Me acabas de decir que se ha acabado

Que tanto como a? mí, a ti te duele

Que se rompe la red que nos unía

Maldito ADeSeeLe.

Tu nacimiento

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — carla at 2:24 am on sábado, noviembre 21, 2009



Amor. Placer y más amor.

Magia. Dolor y más magia.

Tu llanto me buscó.

Tus ojos me dieron

tu aprobación.

Tu nacimiento fue

un paso de gigantes.

En el camino

perdimos nuestros nombres.

En el trayecto

adquirimos otros nuevos.

Papá. Mamá.

Tu amor era tan inmenso

que, a veces, no nos alcanzaba

la jornada.

Amor. Cariño. Amor.

Tu cuerpo

era como el cristal.

Tu mente

era como la arcilla.

A tu cuerpo

lo mecía el viento.

A tu mente

el deseo.

Ternura. Paz. Ternura.

Desde entonces,

no hay herida más profunda

que tu desconsuelo

ni hay melodía más afinada

que tu risa.

Amor. Cariño. Magia.

Tu vida.

Nuestra vida.

Autonomía táctil

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — Nora Noemí Zeliz Pirillo at 4:01 pm on viernes, noviembre 20, 2009

Autonomía táctil

A veces mis manos

se mueren sobre mis

rodillas, derrotadas

de tanto trabajar

se unen y se quedan dormidas .

Tienen secretos entre ellas

y además se pasan

consejos de belleza.

Por la mañana lo

primero que hacen

es abrazar la taza de leche

luego calidamente

revisan cada dormitorio

y abriendo las ventanas

dejan pasar el sol.

Luego se precipitan

en la tarea de alimentar

a mi familia, ellas prestas

trabajan con sabiduría

mezclando sabores y colores.

Cuando han cumplido

con sus deberes

buscan ávidas el placer

y teclean rápido

los pensamientos

que a veces llegan en tropel.

Más otras veces perezosas

sólo desean rozar

la dulce piel que se

deje querer, así cada

día aprenden solas

dejándome participar

del amor que necesito dar.

Restos de Araucaria

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — albino at 3:58 am on viernes, noviembre 20, 2009

Buscaba su edad a cada paso
con sosiego infinito e inmutable.
Cada año afloró eterno,
desafiando el paso del tiempo.
Miles de tormentas lo amedrentaron,
miles de seres lo abordaron,
seres de alas ingentes,
relámpagos de voz estridente.

El manto azul ondulaba lejos
susurrando en cada oleaje,
con el aire plagado de arena
la misma que le azoró en sueños.
Sus viejas piernas tristes
penetraron en tierras ancestrales,
hincando entre rocas profundas
que marcaron su historia abnegada.

Hace días quitó el orujo
de un cuerpo cansino y débil,
descubrió días hermosos,
pero nunca supo quererlos.
Piel llena de surcos agrestes,
cubierta de simientes retoños
que roturaron campos impensables
generando múltiples vidas inocentes.

La mirada se transforma en silencio,
el viento ruge en la tristeza
intenso, imponente y desgarra;
extinguiendo el alma de su corteza.
Un cuerpo extenso? con lazos secos
yacía diseminado en el suelo.
Sintió alrededor su propia naturaleza,
viva y extraña, observando su recuerdo.

De un amor y un barrio

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — Carminacd at 10:54 am on jueves, noviembre 19, 2009

Recuerdos de los malos colecciono,

de los otros, contados con los dedos:

la parra del pasillo de mi abuela

y esas uvas que Bacco envidiaría;

ese beso en el banco de la iglesia

con los ojos cerrados por placer

y tus rayos de luz sobre los párpados.

Calles de tierra, flor de paraíso,

comer fruta robada de la planta.

Haber tenido, haber amado mucho;

haber perdido, haber odiado tanto.

Filtraba entre las hojas desiguales

un sol que era pasado e ilusiones,

película gastada; sol, tu áurea.

Zanjas, charco engendrado por la lluvia,

el útero de jóvenes promesas.

?

Carmiña Candido Daverio

Fertilidad

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — Alicia at 3:56 pm on miércoles, noviembre 18, 2009

?

?

POESÍA. Primer ejercicio

Fertilidad

?

Tal vez hubiese sido más sensato

apelar a ti, fuente milagrosa

que te regalas, sempiterna diosa,

mente mía, a veces de antemano.

Pero he resuelto calar en lo más hondo,

bucear lo más profundo en el olvido,

dentro del corazón que arde sin pausa

en un volcán ardiente convertido.

No hay sentimientos vivos ni inhumados,

ni pasiones del hoy ni del otrora ,

ni suspiros, ni lágrimas, ni besos,

ni pesares que allí no se atesoran.

Es así que aceptando el desafío

intentaré escribirlo desde el alma,

volando sin recelos ni prejuicios

hasta el confín que mi memoria alcanza.

Más, de nada nos sirven los recuerdos

si? el corazón no late entre sus páginas,

si no surgen desde ellos nuevos bríos,

si no nos aminoran la nostalgia.

Si no retornan sólo como fantasmas

los amores que antaño nos marcaron,

si no son sus figuras y sus voces

simples reminiscencias del pasado.

Deben volver entonces las saudades

como huellas de un tiempo que perdimos,

como pisadas firmes que nos marcan

los nuevos? avatares del camino.

Como ríos de lava que descienden

desde el núcleo que bulle y energiza

insuflando calor y? vientos nuevos

en las ríspidas sendas de la vida.

Como estrellas que en las noches oscuras

alumbran el camino intransitable,

como gotas de agua que en las hojas

tiemblan de gozo cuando el sol se abre.

Como los mares de indomables olas

calmándose en los tiempos de bonanza,

como campos de trigo agonizantes

cuando la lluvia? buena? se descarga.

Como pájaros de vuelo inagotable

surcando con las alas desplegadas

el infinito azul de nuestros sueños,

el inmenso caudal de nuestras almas.

El recuerdo de tú mirada

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — Esther at 10:38 am on miércoles, noviembre 18, 2009

Vi las tinieblas en la luz de tu mirada

¡Ayer hermosa como ninguna!

Hoy negra noche apagada.

¡No es cierto¡ ¡No es verdad¡

Me digo cuando pienso en la luz de tu mirada

Hoy perdida para siempre, en esta horrible madrugada

Un día… y otro…y otro…

marcan mi vida como puñales

clavadas tus pupilas, en el fondo de mi alma.

Tu rostro, dolorido, sorprendido…cara a cara el fin cercano.

Esa imagen indeleble que atormenta mis noches.

sin retorno cada hora, minuto, segundo a segundo,

sin que la piedad del sueño me alcance.

¡Muerte, fuiste mi enemiga!

La dueña de nuestro hogar

Estuviste a mi lado noche y día.

Me robaste el beso, el abrazo y las sonrisas.

Encontré la tristeza y la amargura.

Las noches de vigilia, sin alba ni luz.

Vi tu rostro en el amado.

Te ahuyentaba pero tú esperabas agazapada.

No supe defenderme del acecho.

Al fin la victoria no fue mía.

Te llevaste el tesoro que más amaba.

Quedó sólo su recuerdo,

los hijos nuestros por quien luchar.

Luz. Penumbra. Tinieblas

Amor, recuerdo, olvido:

Un abismo haber querido

RECUERDOS

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — Corina Harry at 3:35 am on miércoles, noviembre 18, 2009

Incesantes mensajeros del pasado

Habitantes del vacío y la materia

Acuden cuando alguien los convoca

O acuden porque sí, con insistencia.

?

Excusas de mil comportamientos

Escudos de variadas consistencias

Esparcen por el aire densidades

O etéreas pinceladas que te apresan.

?

Te muestran lo importante de una historia

Te remarcan los detalles que detestas

Aparecen de la nada, se te imponen

Aunque busques ocultarlos con? destreza.

?

Su silencio tiene un costo impostergable

El tributo a la cordura y al suplicio

Y aunque quieras apartarlos de lo bueno

Te roban de tus sueños lo exquisito.

?

Te acosan cuando estás más vulnerable

Te envenenan el alma con malicia

Interfieren con todo lo que amas

Lo que habías perdonado, resucita.

?

No hay piedad que les importe o los conmueva

Impertinentes viajeros sin descanso

Recopiladores de antecedentes y mezquinos

Traficantes de la vida de a pedazos.

?

Guardianes de congojas y pesares

Enemigos de la paz y la templanza

Del Ser en su estado de armonía

Del fluir de la vida y la esperanza

?

Ni la muerte los acecha en su guarida

Saben protegerse del olvido

El temor es el poder que los sostiene

Siempre atacan cuando estás desprevenido.

?

No intentes desplazarlos ni anularlos

Sólo ríe en silencio ante sus sombras

No resisten la burla del presente

No les prestes atención. Tan solo ignora.

Recuerdos de mi niñez

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — Alfonso at 10:40 pm on martes, noviembre 17, 2009

Siento el aire en mi rostro

la espuma del mar en mi cara

el viento sur y su rastro

el mar azul que no para.

?

el cascabeleo de los barcos

la calma de puertochico

los niños entre los charcos

y a mi madre yo muy chico.

?

Mi niñez fue mar y viento

fue calle y aliento

fue lluvia y libertad

fue colegio y amistad.

?

En el ansiado verano

infinito y eterno

a la playa muy temprano

aventuras sin gobierno.

?

Tan largos eran los veranos

que nunca tenían fin

siempre entre las manos

teníamos algún confín.

?

El grupo y la amistad

El amor y la fidelidad

El sueño y los ideales

nada en sus cabales.

?

Fue un sueño

un regalo

libertad sin dueño

nada malo.

?

Fue tan corto

tan fugaz

casi no me acuerdo

ser rapaz.

?

Ahora amargan recuerdos felices

lo que fue y pudo ser

el esplendor de entonces

y el ansia de conocer.

?

Dicen que volveremos

la infancia a recorrer

ya de ancianos si tenemos

la fuerza de remover

una memoria remota

a salvo y no rota.

?

Más yo sé que los recuerdos

Recuerdos son

Y que la vida sigue

sin mucha distracción.

Ecos del ayer

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — Indalo at 7:37 pm on martes, noviembre 17, 2009

Entre tú y yo, el recuerdo

Entre ayer y hoy, la nostalgia

Entre tu alma y la mía, el orgullo

Entre tu orgullo y el mío, el silencio.

¿Y la brisa de tu aliento?

¿Y la fragancia de tu piel?

¿Y el tesoro de tus labios?

¿Y nuestras resacas de amanecer?

En cada mujer, tu cara

En cada flor, tu piel

En cada suspiro, tus ojos

En cada aliento, tu ser.

Fantasías de amor

Ilusiones de amanecer

Lamentos sin testigo

Añoranza de una mujer.

DISTANCIA DE LAS PIELES

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — atman at 12:53 pm on martes, noviembre 17, 2009

El olvido es el séptimo sentido,

? ése del que nadie se acuerda-

?

?

Hay sencillez en la distancia de las pieles,

huecos de mieles durmiendo plenos.

Espacio mayor al que cubren las alas,

mayor aún al del cordón más largo.

Busco por los rincones tus aromas

para embeberme de ellos.

El aroma llena huecos,

achica las distancias,

sugiere ficción de encuentro.

Milésimas de segundo te pegas a mi abrazo…

te duermes bajo mi abrigo…

respiras agitado sobre mi hombro.

Entonces aprieto tu mano,

pero tan despacio…tan despacio…

que tus dedos se desdibujan hacia la nada.

Los límites del cuerpo juegan a las escondidas

en esta gigante Tierra,

pero Lo Que No Se Ve,

entabla sutiles encuentros

a los que sólo el corazón se invita.

Abarco todos los sentidos,

todos menos el olvido.

Ernesto la bufanda y un Elefante rosa.

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — Nora Noemí Zeliz Pirillo at 12:21 pm on martes, noviembre 17, 2009

Y Pachabel te puso en mi camino, asombrándome
del canon que cambió por arte del reloj ,porque sí
Todo cambió; las medidas de mis dedos y mis ojos
se almendraron ,cuando descubrí a Ernesto saliendo
de una bufanda, era larga pero trasparentaba
era placenta y del cordón umbilical Ernesto me miraba.
Su tersa piel se sintió mojada.¡Claro flotaba en agua!
Con el tacto de los ciegos roce su suave piel; OH
Comprendo el limbo; era la cáscara de nuez, los gajos
de naranja que de pronto me hablaron en Francés.
Ernesto está naciendo hombre nuevo y no sabe si reír
o dejar que las lágrimas afloren. De pura emoción
mi mano hurgó en la bufanda y naciste desnudo para mí.
Tuve pánico de despertar de ese ensueño y que desaparecieras
¿Más,… no, estás…estás? Vístete de vida nueva, olvida las agujas del reloj
mide la fuerza de tus nuevas piernas ¡Nacidas para mí!
Ernesto deja que se marche el Elefante.
Portándose tu vieja sombra, lejos la llevó.
Con mi lupa interestelar y ayuda de Spook
conseguí que te volvieras hacia mí ,tú tan alto yo tan pequeña
Quise tomar entre mis manos deshilachadas una vieja chistera
tú me mirabas y oyéndome tararear el Canon ,saqué un
gran arco iris ,para ti .Sangraron mis manos sosteniendo ese
último rayo carmesí y de puntillas frente a ti saqué ese eterno
ramo de rosas ,rosas rojas ,casi negras y mi geografía se desvaneció.
Te di tiempo para el recuerdo y huí silenciosa detrás del Elefante rosa-

Recuerdos – vivir en dictadura

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — ivalopano at 11:46 am on martes, noviembre 17, 2009

El Hombre tiene pena en los ojos,

silencio en la voz,

dolor en el alma

que no llega a gritar.

Tiene las manos vacías,

entumecidos los pies,

por el frío.

El Hombre tiene dinero,

tiene guerras y hay pena,

tristeza y muerte.

Tiene el dinero

y hay guerras y hambre.

Tiene las riquezas,

hay miserias y matanzas.

Va gimiendo sus tristezas

y en su pena agonizan las esperanzas…

Tiene un gritar,

tiene un llorar y sufrir,

un vivir y un nacer,

un nacer, un vivir muriendo,

y un morir, después, definitivo…

Tiene un triste ayer;

un peor ahora,

un largo y gris ayer,

y un triste y confuso mañana…

Mira de frente esta pesadilla,

toca con tus manos, esa llaga,

mira con tus ojos, ese dolor,

y di, si puedes, con la voz,

un consuelo.

Pon, de tu alma, una flor,

aunque marchita de sufrir;

alguna fragancia y un color

que pueda, al Hombre, redimir…

Tiene egoísmo y maldad,

envidia y codicia,

odio y mezquindad,

el puntapié en lugar de caricia.

El dinero por principio y fin,

por culto y religión,

como enfermedad y remedio,

por mal y por bien,

por debilidad y fuerza,

como amo y señor.

El dinero por pecado,

el dinero por enmienda,

el dinero por infierno,

y en el dinero busca,

sin hallar, la Paz…

Necesita pureza,

hay prostitución,

necesita elevación espiritual

pero hay bajeza moral.

Necesita franqueza y sinceridad

tiene engreimiento y vanidad.

El Hombre necesita manos,

tiene garras,

tiene el rugir,

necesita voz.

Necesita alas, quiere volar,

tiene cadenas, puede morir.

Necesita decir, quiere cantar.

tiene silencio, pues, a sufrir.

Quiere andar y tiene grillo en los pies

Pero, oye, tú: Vivir, es el lema,

vivir, a pesar de todo,

vivir, aunque cada día mueras,

vivir, para cambiar y quitar ese lodo.

Vivir para rescatar

la niñez sin infancia,

la infancia sin calor,

la vida sin color,

el dolor sin razón,

y para darle razón

de ser al amor…

RECUERDOS DE JUVENTUD

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — SKORPIONA at 10:03 am on martes, noviembre 17, 2009
Doliente dolor que duele incesante,
me obliga a mirar de reojo al pasado:
viejo almanaque con hojas ajadas.
Enrojecidos ojos quedan resecos,
vierten sus aguas sobre cuarteadas
mejillas, que absorben sedientas
aquel maniantal de penurias.
?
¿Juventud un divino tesoro?
¿Juventud hacedora de sueños?
¿Juventud de? agradables recuerdos?
¡Tesoro de oxidadas monedas!
¡Sueños que luego son pesadillas!
¡Recuerdos de imborrables? errores!
?
Pasajera juventud,
enredadera de? ilusiones y titubeos
con hojas de inexperiencia:
¡enhorabuena tu brevedad!
Sobre ti no quiero más escribir.
?
©SKORPIONA

Los recuerdos

Filed under: Poesía - Primer ejercicio — Sofia Moreno at 2:13 am on martes, noviembre 17, 2009

Una vieja torre Eiffel de plástico
rallada y fea a más no poder
made in Taiwan.

Una tetera con el asa rota
que fue de mi abuela.
Tiene florecillas pintadas con delicadeza
pero no vale más que el barro con que se hizo.

Un viejo rosario negro
que vivió la guerra civil
entre los dedos de mi abuelito
indignado por los «rojos».

Un bikini apolillado
que se puso mi tía preferida
la que dejó dos huérfanos de dos y cuatro años
antes de tirarse por el balcón.

Miles de fotos amarillentas
sonrisas de otras épocas
de gente que ya no está
pero que sigue viva en mi corazón
como el primer día.

Todos estos recuerdos
los he arrastrado en cajas de mudanza
por tres continentes
en más de siete direcciones postales.

He pagado a empresas
por trasladar estas cosas
mientras los míos me decían:
«¿Todavía no has tirado estas porquerías viejas?»

Sé que ya no las tiraré nunca.
Son el disco duro de mi corazón.

Cuando las veo
vuelvo a tener trece años
mi madre me llama para poner la mesa
ella es de nuevo esa mujer bellísima
elegante
desenvuelta
inteligente
que se acuerda de quien soy.

Tan brillante en sociedad
que jamás llegaré siquiera a la altura de sus tacones.

Capaz de organizar cenas para trescientos invitados
sin que se queme la salsa.
Todos alaban su cocina refinada.

Capaz de bailar el vals
y el cha-cha-chá.

Capaz de hablar conmigo
más aún, de escucharme de verdad.

Capaz de ver que faltan tres cuchillas
de afeitar
cien pastillas del somnífero
de Papá
una botella de whiskey entera
y del bueno, además.

Capaz de recordar el nombre de
mil personas
caras de cien amigos
cosas que creía olvidadas.

Capaz de perdonar.
Capaz de abrazar.

***

Serpientes ondulando por el suelo
sogas que los niños ven vivir ;
una bolsa de plástico atada a la espalda
basta para ser paracaidista
cuando tienes seis años.

Piedras preciosas que recoges entre la arena
de la playa :
el abuelo dirá que no es oro
pero tú sabes bien que sí.

El ya no sabe ver tesoros
pero tú sí.

Mantos de princesas
coronas de reyes
espadas de caballeros :
los mayores solo ven trapos en jirones
trozos de cartón
palos de desecho.

Como esos objetos ajados
que me niego a tirar.

No tiraré esas porquerías viejas.
Para mí no lo son.
Son el disco duro de mi corazón.

(fin del primer ejercicio de poesía)