Como el amargo pescador de truchas cuando al fin de la jornada poco ha podido hacer con sus carnadas. Asi observo, me observo, intentando en cada lance alcanzar la presa, en algun momento durante mis dias seguro tendré para invitar a los amigos, hoy no tengo nada, solo puedo estrechar la mano con el ánimo de acero de un pescador fallido.
Comment por Nora Noemí Zeliz Pirillo
6 noviembre 2009 @ 8:05 pm
¡Bravo! Breve y grata lectura para un mini relato tan inteligente
Mucha suerte
Noe
Comment por RELICARIO
7 noviembre 2009 @ 7:16 pm
Noe:
Es la sucinta escritura y resumida papeleta el escape cierto de quien escribe, no así el pensador que contruye el universo entero e intenta ponerlo en tinta o en cualquier cesto.
Te agradezco aquello de la grata lectura.
Relicario.
Loas a quienes pueden ver con claridad lo que yo ignoro.
Comment por Nora Noemí Zeliz Pirillo
12 noviembre 2009 @ 7:23 pm
Pues fíjate que yo y a pesar de tu descreimiento, pude leer muchas cosas más.
Primero que te tratas duramente y que eso no atrae a los peces, aunque des fuerte la mano.
Cuando la soledad llega a cotas altas, la gente deja de verte solitario .Deja de verte
Porque simplemente te desmarcas del resto, que no son ni mucho mejores ni tanto peores, solo son es cuestión de apretar calidamente esa mano y los peces te adorarán.
Perdón tu respuesta me sorprendió en mal momento, la famosa gripe y claro dejé de pasar por estos lares, hay de todo incluso gente que ve al Gran hermano.
Otros se quedan ciegos leyendo. Oh muchos ven el Gran Hermano, nadie te comentó.
Un millón de moscas no pueden estar equivocadas.
Mi admiración
Noe
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